El transporte de mercancías peligrosas está regulado en el acuerdo ADR

Según la tipología de mercancía o materia que tenemos que transportar en nuestro vehículo, éste debe estar preparado, acondicionado y/o carrozado con una serie de requisitos.

Es importante recordar que existen muchos materiales clasificados como peligrosos que se pueden transportar sin necesidad de una aprobación ni para el vehículo ni para el conductor, pero sí que deben respetarse siempre las cantidades exceptuadas marcadas, los embalajes y las condiciones del transporte que define el acuerdo para ese producto en concreto.

Podemos encontrarnos en la situación de que la materia peligrosa a transportar requiere de un vehículo homologado, y decidimos que lo mejor es optar por una furgoneta o chasis de cabina ligero para su transporte (menos de 3.500kg de MMTA), pero resulta que no existe en el mercado un vehículo de base que cumpla las disposiciones técnicas del ADR en su totalidad cuando sale de la fábrica. 

Es por ello, que es importante saber que si compramos un vehículo ligero, solo podremos transportar mercancía que no sea peligrosa o peligrosa, pero en cantidades y condiciones específicas que no requieran aprobación.

El acuerdo ADR cambia cada dos años impares y es imprescindible estar atentos a las actualizaciones que se publiquen. Son muchas las materias y productos que son peligrosos y no se consideran o evalúan correctamente. Y también es muy posible que las condiciones que valían en los anteriores textos del acuerdo, en el presente no nos sirvan.

El Acuerdo europeo sobre transporte internacional de mercancías peligrosas por carretera (ADR), se firmó en Ginebra el 30 de septiembre de 1957 y entró en vigor el 29 de enero de 1968. La adhesión de España al ADR se produjo el 22 de noviembre de 1972 y, en base a lo dispuesto en su artículo 7.2, entró en vigor para nuestro país el 22 de diciembre de 1972. Desde entonces, el transporte de mercancías peligrosas está regulado en este acuerdo.

Este acuerdo contiene todas aquellas acciones necesarias para establecer las materias y objetos cuyo transporte por carretera está prohibido o autorizado exclusivamente bajo unas condiciones específicas. El acuerdo determina las cuestiones previas a la realización del transporte en sí mismo, la elección del vehículo y su conductor, el equipamiento, el embalaje a utilizar, las cantidades máximas a transportar, las posibles exenciones y cantidades exceptuadas, etc.

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